¿Somos veganos?

Lo primero que quiero hacer es una aclaración, porque nosotros no nos consideramos veganos, porque ser vegano incluye muchas más cosas además de la alimentación, es un estilo de vida en el que se respeta la vida del animal de igual a igual y nosotros a día de hoy no estamos en ese punto ya que creo que ser vegano es algo que conlleva tiempo y concienciación.



La cosa es más o menos así:

  • Ovolacteovegetariano: No comen carne ni pescado, pero si toman productos lácteos, derivados y huevos. 
  • Vegetarianos: No comen nada de procedencia animal. Ni carne, pescado, huevo, miel,  productos lácteos ni derivados. 
  • Veganos: No comen ni usan nada de procedencia animal y esto va mas allá de la alimentación. hablamos de no usar lana, ni cuero ni piel. Visten con prendas de algodón, utilizan cosméticos y maquillaje libre de crueldad animal, etc.. 


Nosotros podríamos decir que somos vegetarianos, aunque la gente suele confundir los vegetarianos y los ovolacteovegetarianos por lo que cuando alguien no come nada de procedencia animal se le denomina vegano aunque no lo haya aplicado a todos los aspectos de su vida.

Dejamos ya a un lado los tecnicismos para entrar en lo que nos trae a este post.

¿Porqué decidimos no comer nada de procedencia animal?

Todo empezó con un dolor en el estómago que se prolongaba por meses, dolor que cada vez era más intenso y en el cual los doctores no me estaban dando solución. Entre sus recomendaciones me recomendaron dejar la leche y derivados por aquello de la lactosa y de la proteína de vaca a la que mucha gente le tiene alergia o intolerancia. Yo nunca he tenido pero según me dijo la doctora es algo que con el tiempo puede dar porque nuestro cuerpo no está preparado para digerir esta leche y necesita unas enzimas especiales...
También me dijo que podía ser estrés, mala digestión...etc.. pero no me aseguró nada.

Me fui a casa pensando que quizá todo el problema estaba en la leche, así que me puse a investigar por internet y encontré un foro de intolerantes a la lactosa donde recomendaban un documental llamado "What the health".
Vi el documental y todo cambió.
Cambió mi forma de ver la alimentación, de ver la medicina, de ver mi cuerpo. Algo en mi cabeza hizo clic y ya no pude parar.
Comencé a devorar documentales y a leer, me puse en contacto con nutricionistas de ambas partes, tanto veganos como en contra de ésta alimentación y si es cierto que estaba en contra de renunciar a todo consumo animal si me dijo que había que limitar su consumo al mínimo porque hoy en día se abusa demasiado de los productos animales y se comen muy pocos vegetales y eso nos estaba pasando factura a la salud.

Todo me daba vueltas a la cabeza.

Seguí viendo documentales, vídeos de Youtube...explicaban como la ganadería estaba acabando con el agua, como el 70 % de los cultivos mundiales son dedicados a la ganadería y que con ello se podría alimentar a todo el tercer mundo, la deforestación, el calentamiento global, el sufrimiento del animal...

Y tomamos una decisión.

Para mucha gente no será la decisión correcta, para mucha otra será la decisión ideal. Lo importante es respetarse.

Sinceramente creo que falta muchísima información, ésto es un poco como las sillas a contramarcha, todavía no se conocen mucho pero poco a poco va en expansión porque sus beneficios o más bien su falta de lesiones en caso de accidente hace que cada vez más gente se de cuenta de que lo ideal es una silla a contramarcha. Con el veganismo - vegetarianismo pasa lo mismo. Al principio la mayoría se muestran escépticos hasta que conocen la información.
También hay muchos que a pesar de conocer la información deciden seguir comiendo productos de origen animal, me parece bien porque tomas una decisión en base a toda la información y haces lo que crees mejor o conveniente en tu situación, a otras personas les resulta muy difícil dejar de comer ciertos alimentos y es totalmente normal porque llevamos así toda la vida, es lo que conocemos y a lo que estamos acostumbrados.

El mundo está en constante cambio, creo que tenemos que ser sinceros con nosotros mismos y reconocer que éste ritmo de vida que llevamos, ésta explotación de los recursos nos está pasando factura y que estamos dejando un futuro muy muy feo para nuestros hijos y nietos y que en nuestra mano está poder hacer algo.

Creo recordar que hace unos veinte años decías que reciclabas y te decían: ¿Reciclar? ¡Vaya tontería! Ahora la mayoría tenemos en casa distintos contenedores para los distintos residuos aunque hace unos años tener diferentes contenedores parecía una locura. Ahora es totalmente normal. Evolucionamos.

En estas semanas, ¡Semanas! He sido juzgada, humillada y presionada por nuestra decisión de no tomar ningún producto de origen animal, hay quien dice ¡Vive y deja vivir!
Pues lo podemos aplicar también en el caso de los animales.

Yo personalmente os animo a que le echéis un ojo a varios documentales que podéis ver en Netflix o incluso en Youtube porque aunque no vayáis a optar por el veganismo es algo interesante de saber.







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