El otro día llevaba a la locura a las pequeñas, tuve que ir corriendo a por la mayor al colegio cuando tenía las vacunas de la pequeña solo unos diez minutos después. No pasa nada, voy en coche, y no estoy haciendo nada excepcional que no hagan todas las madres en algún momento de su día a día; pero reconozco que hay días en los que me encuentro totalmente desbordada y espero con ansía el momento en el que mi marido entra en casa y mis dos retoñas salen corriendo hacía él. "Por fin me puedo duchar" es el pensamiento que me suele venir a la cabeza.
Entonces en aquello que empiezas a divagar, a enlazar un pensamiento con otro comencé a pensar que pasaría si no tuviera un padre al que las niñas corrieran llenas de alegría al escucharlo entrar por la puerta. Ese pensamiento me llevó a otro, tengo una amiga, muy amiga, de las de años, de estas que dicen que si la amistad dura más de ocho años es para toda la vida, bien; pues una de estas. Esta amiga es madre soltera y todo el peso de la educación y mantenimiento del hogar recae sobre ella.
Trabaja, cuida de la niña y saca la basura (entre otras cosas, ya me entendéis).
Madres solteras, padres solteros, familias monoparentales, sois mis ídolos. Lo que a muchos nos cuesta sacar con esfuerzo de dos personas vosotros lo sacáis con muchísimo esfuerzo de solos. Tiráis del carro como los autónomos, con el coche a cuestas si hace falta.
Si es difícil conciliar vida laboral y familiar cuando tienes otra persona con la que cuadrar horarios para que los niños siempre estén atendidos, no se me pasa por la cabeza cuadrar horarios cuando eres solamente tú. No tiene que ser nada fácil.
De hecho, hay un estudio realizado en Alemania (Podéis verlo aquí) en el que dice " las madres solteras se sienten más fuertes, trabajadoras, positivas y responsables que aquellas que no tienen hijos" puede ser por lo que os digo, la mayoría no se tienen más que a ellas mismas para sacarse las castañas del fuego.
Yo no puedo afirmar personalmente si éste estudio es cierto o no, si me sentiría más empoderada al estar soltera criando a mis dos hijas, lo que si que puedo afirmar es que admiro a las mujeres que lo hacen. Admiro a mi amiga, como con todo lo que tiene encima sale adelante sin tener, como puedo tener yo, esos minutos en los que mi marido se lleva las niñas al parque y yo soy libre para tomarme esos minutos para mi o mis quehaceres. Ella no dispone de eso, porque es única para su niña, porque no puede delegar el cuidado de su hija a la figura paterna porque por motivos que no vienen al caso la parte paterna no está.
Os admiro, porque cuando yo tenía noches en las que el sueño me vencía y llamaba al papi para hacer el relevo vosotras no tenéis relevo. Porque cuando estoy enferma el papi nos cuida a las tres, y vosotras cuando estáis enfermas seguís cuidando a vuestros retoños y de vosotras mismas.
Os admiro, porque en el fondo todas somos un poco madres solteras o padres solteros cuando nuestra pareja pasan horas trabajando fuera de casa.
Somos super mamis todas y cada una de nosotras, pero hoy esta entrada la quería dedicar a todas las mamis que están solas y que a pesar de luchar contra viento y marea en muchas ocasiones sacan adelante solas a toda la familia.
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